Casos de Éxito
Historias sin maquillaje
No usamos palabras grandilocuentes; te contamos cambios reales y concretos. Estas son algunas de las transformaciones que hemos visto.
Del corre‑corre a la semana con foco
Claudia, diseñadora independiente, vivía apagando incendios. En 4 semanas instalamos su Semana WIGO: cada lunes miraba su tablero, elegía tres prioridades y decía no a lo que no tocaba.
Resultado: cerró 2 proyectos pendientes y subió su tranquilidad de “3/10” a “8/10”.
Presentaciones que por fin venden
Un estudio de servicios tenía propuestas extensas y poco claras. Con WIGO Studio armamos plantillas cortas y directas: problema, solución, pasos y precio.
Al mes, aumentó la tasa de aceptación y disminuyeron las idas y vueltas eternas por correo.
Seguimiento automático, ventas que no se escapan
Un equipo pequeño perdía oportunidades por simple olvido. Instalamos recordatorios amables y un registro simple de conversaciones.
En dos semanas, recuperaron 3 ventas que se habían enfriado.
